Preparamos la masa de la pizza la noche anterior, y la dejamos en la nevera tapada con un film.
A la mañana siguiente, una hora antes de prepararla, la sacamos del frigorífico para atemperar, extendemos con la mano haciendo la forma de la pizza y cubrimos con la base de tomate, y ponemos el calabacín en tiras espaguetis formando nidos que remate con un tomate. , los trigueros, champiñones y por supuesto unas bolas de mozarella fresca.
Precalentamos el horno a 220 grados arriba y abajo, introducimos y listo.
Añadimos un buen chorrito de AOVE macerado al ajo morado para rematar dóndelo así el toque Gourmet. ¡No veas que rica!
Esta receta es perfecta para probar lo que tenemos por casa. ¡Anímense a probarla y cuéntenme qué les parece!